El 29 de mayo de 2025, València se convierte en el epicentro de una Huelga General convocada por varios sindicatos minoritarios, incluyendo Intersindical Valenciana, CGT, CNT y COS. Esta movilización surge como respuesta a la gestión de la dana del 29 de octubre, un evento que dejó a la población en estado de alerta y que, según los convocantes, evidenció una «negligencia» que puso en peligro la vida de miles de trabajadores. La jornada de huelga tiene como objetivos principales exigir responsabilidades a las autoridades y demandar un refuerzo de los servicios públicos, así como la reducción de la jornada laboral.
Desde la madrugada, los piquetes han comenzado su labor informativa, destacando su presencia en Mercavalència y en las cocheras de la EMT en San Isidro y Serrería. Se anticipa que la huelga afectará a diversos sectores, incluyendo el transporte público y los servicios sanitarios, aunque los sindicatos mayoritarios, CC OO-PV y UGT-PV, no han respaldado esta movilización.
La jornada se acompaña de dos manifestaciones programadas. La primera, que inicia a las 12:00 horas en la Estación del Norte, recorrerá el centro de València hasta llegar a la plaza de la Virgen. La segunda, bajo el lema ‘Mazón, dimissió’, comenzará a las 19:00 horas en la plaza del Ayuntamiento, abarcando varias calles emblemáticas de la ciudad. Estas manifestaciones no solo se centran en la crítica a la gestión de la dana, sino que también incluyen consignas contra la privatización y en apoyo a causas internacionales como la situación en Palestina.
La participación en la manifestación ha sido notable, con miles de personas uniendo sus voces en un recorrido que ha llenado las calles de València. Desde bebés en brazos hasta personal de institutos pidiendo ayuda para la reconstrucción, la diversidad de los asistentes refleja la amplia gama de preocupaciones que motivan esta movilización. Los cánticos resuenan con fuerza, mezclando mensajes políticos con demandas sociales, creando un ambiente de unidad y determinación.
La Generalitat Valenciana ha estimado que el seguimiento de la huelga es del 5,18% en toda la Comunitat Valenciana hasta las 10:00 horas. Aunque la cifra puede parecer baja, los piquetes han logrado paralizar actividades en puntos estratégicos como Mercavalència, lo que ha generado retenciones en las carreteras circundantes. Las acciones de los piquetes han sido acompañadas de pintadas en sedes de partidos políticos y entidades bancarias, reflejando el descontento generalizado.
A medida que avanza la jornada, se ha desplegado un fuerte dispositivo policial en los alrededores de la Estación del Norte, donde se espera que la manifestación alcance su punto culminante. La presencia de fuerzas de seguridad busca garantizar el orden público, aunque hasta el momento la movilización ha transcurrido sin incidentes graves. Sin embargo, la tensión es palpable, y los organizadores han hecho un llamado a la calma y a la unidad entre los manifestantes.
La Huelga General del 29 de mayo no solo es un evento aislado, sino que se inscribe en un contexto más amplio de descontento social en la Comunitat Valenciana. La gestión de la crisis provocada por la dana ha dejado a muchos ciudadanos con un sentimiento de abandono por parte de las autoridades. Las demandas de los sindicatos minoritarios reflejan una necesidad urgente de cambio en la política local y en la gestión de los recursos públicos.
A medida que la jornada avanza, los organizadores y participantes continúan compartiendo actualizaciones a través de redes sociales, buscando mantener informada a la ciudadanía sobre el desarrollo de la huelga y las manifestaciones. La jornada se presenta como una oportunidad para que los ciudadanos expresen sus preocupaciones y demandas, y para que las autoridades tomen nota de la necesidad de un cambio en la gestión pública.
La Huelga General del 29 de mayo en València es, por tanto, un reflejo de la lucha de la clase trabajadora y de la ciudadanía en general, que busca ser escuchada y atendida en sus necesidades. La jornada no solo es un llamado a la acción, sino también una oportunidad para que la sociedad civil se una en torno a causas comunes, en un momento en que la solidaridad y la unidad son más necesarias que nunca.