La noche del pasado jueves se convirtió en una tragedia en el puerto de Gandia, donde una mujer de 38 años falleció tras caer su vehículo al agua. El accidente ocurrió alrededor de las 20 horas, cuando el coche, que transportaba a dos mujeres brasileñas de vacaciones en Alzira, se precipitó a la dársena. La joven de 19 años que acompañaba a la víctima logró salir del coche antes de que este se hundiera, pero su amiga no tuvo la misma suerte.
### Circunstancias del Accidente
Los detalles del accidente son alarmantes. Testigos presenciales relatan que las dos mujeres mostraban un comportamiento errático en el aparcamiento del puerto. Según una joven que estaba presente, las dos parecían estar en un estado de embriaguez, dando tumbos y gritando, como si una de ellas estuviera enseñando a la otra a conducir. Este comportamiento inusual culminó en una maniobra peligrosa, donde el vehículo aceleró hacia el borde del aparcamiento, superando una pequeña franja de jardín antes de caer al agua.
La rápida respuesta de los servicios de emergencia fue crucial. Agentes de la Policía Local, junto con efectivos de Bomberos y la Policía Nacional, se movilizaron inmediatamente al lugar del accidente. A pesar de sus esfuerzos, el coche quedó sumergido a más de cinco metros de profundidad, lo que complicó las labores de rescate. Los buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil fueron llamados para ayudar en la búsqueda de la mujer atrapada en el vehículo.
Pasadas las 23:00 horas, los equipos de rescate lograron recuperar el cuerpo sin vida de la mujer. La situación fue desgarradora, ya que varios testigos, incluidos inmigrantes que se encontraban en la zona, se lanzaron al agua en un intento heroico de salvar a las ocupantes del coche. Sin embargo, solo pudieron rescatar a la joven de 19 años, quien quedó atrapada por el cinturón de seguridad de su amiga, lo que impidió que la sacaran a tiempo.
### Investigación y Resultados de las Pruebas
Tras el accidente, la superviviente fue sometida a pruebas de alcoholemia y drogas. Los resultados revelaron una tasa de alcohol en sangre de 0,81 g/l, cuadruplicando el límite legal permitido. Además, las pruebas de drogas también dieron positivo, lo que ha llevado a las autoridades a investigar más a fondo su situación. La Guardia Civil está revisando la validez de su licencia de conducir para determinar si estaba habilitada para conducir en España.
Este trágico suceso ha generado una gran conmoción en la comunidad local. La combinación de alcohol y drogas, junto con un comportamiento imprudente al volante, ha puesto de relieve la importancia de la responsabilidad al conducir. Las autoridades locales han instado a la población a reflexionar sobre la seguridad vial y las consecuencias que pueden derivarse de la conducción bajo los efectos de sustancias.
La historia de estas dos jóvenes, que llegaron a Gandia en busca de diversión y aventura, ha terminado en una tragedia que deja un profundo impacto en sus familias y amigos. La comunidad se une en el dolor por la pérdida de una vida joven y en la esperanza de que este tipo de incidentes no se repitan en el futuro. La Policía Local y la Guardia Civil continúan con la investigación para esclarecer todos los detalles del accidente y asegurar que se tomen las medidas necesarias para prevenir futuros incidentes similares.
