La salud dental es un aspecto fundamental que a menudo se pasa por alto en el cuidado general del bienestar. Una de las condiciones que puede afectar gravemente la salud bucal y, por ende, la salud general, es la maloclusión. Este término se refiere a una alineación incorrecta de los dientes y mandíbulas, lo que puede llevar a una serie de problemas que van más allá de lo estético. La doctora María Muñoz, ortodoncista de la unidad dental del Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre, destaca la importancia de una oclusión equilibrada para prevenir enfermedades y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
### Consecuencias de la Maloclusión
La maloclusión no solo afecta la apariencia de la sonrisa, sino que también puede tener repercusiones significativas en la salud. Según la doctora Muñoz, una mala oclusión puede contribuir al desarrollo de caries y enfermedades periodontales. Esto se debe a que la mala alineación de los dientes dificulta la higiene dental adecuada, lo que favorece la acumulación de placa y, en consecuencia, puede llevar a problemas como la gingivitis y la periodontitis.
Además, la tensión muscular asociada a un desequilibrio oclusal puede provocar cefaleas, dolor mandibular y alteraciones en la audición. En casos más severos, puede haber trastornos respiratorios y posturales, ya que la respiración bucal puede alterar el desarrollo facial y provocar apnea del sueño. La doctora Muñoz enfatiza que la enfermedad oclusal es una condición dental que ocurre cuando los dientes no encajan correctamente al morder, generando un desequilibrio en su función y en los músculos y articulaciones de la mandíbula.
Este desequilibrio puede causar un desgaste progresivo y daños en el sistema estomatognático, que incluye dientes, encías, articulaciones y músculos faciales. Las fuerzas desiguales que se generan pueden desgastar el esmalte dental, provocar recesión gingival y causar sensibilidad dental, así como molestias en la musculatura facial y en la articulación temporomandibular (ATM).
### Opciones de Tratamiento para la Maloclusión
El diagnóstico temprano de la maloclusión es crucial para implementar un tratamiento efectivo. La ortodoncia es una de las opciones más comunes y efectivas para corregir este tipo de problemas. La doctora Muñoz explica que el tratamiento ortodóntico busca eliminar las interferencias de la mordida, redirigir las fuerzas oclusales y normalizar la función masticatoria. Las opciones de tratamiento varían según las necesidades de cada paciente y pueden incluir desde ortodoncia fija o alineadores transparentes hasta la extracción de piezas dentales en casos de apiñamiento.
En situaciones más complejas, puede ser necesaria la cirugía ortognática, que implica reposicionar quirúrgicamente el maxilar superior, la mandíbula o ambos, para lograr una alineación adecuada. Esta intervención se recomienda en casos de retrognatia (mandíbula muy atrás), prognatismo (mandíbula muy adelantada), asimetrías faciales, mordida abierta o cruzada severa, así como problemas funcionales al masticar, hablar o respirar.
La doctora Muñoz también menciona la importancia de un enfoque integral y personalizado en el tratamiento ortodóntico. No se trata solo de vender aparatos, sino de ofrecer un tratamiento que se adapte a las necesidades específicas de cada paciente. Esto implica un diagnóstico preciso, el establecimiento de objetivos claros y la creación de una hoja de ruta personalizada para cada caso.
La salud dental es un componente esencial del bienestar general. La maloclusión, aunque a menudo se considera un problema estético, puede tener consecuencias graves que afectan no solo la boca, sino también la salud general del individuo. Por lo tanto, es fundamental prestar atención a la alineación dental y buscar tratamiento adecuado para prevenir complicaciones futuras. La intervención temprana y el tratamiento personalizado son claves para asegurar una salud dental óptima y, por ende, una mejor calidad de vida.
