En el ámbito de la salud, la tecnología avanza a pasos agigantados, y uno de los ejemplos más recientes es el proyecto Kinessensor, desarrollado por el hospital Ribera IMSKE en colaboración con varias instituciones. Este innovador proyecto tiene como objetivo principal la identificación y monitorización de lesiones en las articulaciones, ligamentos y músculos a través de la inteligencia artificial (IA). La iniciativa no solo busca mejorar la atención médica, sino también empoderar a los pacientes en su proceso de recuperación.
### Un Sistema Portátil para la Monitorización de Lesiones
El proyecto Kinessensor se basa en la creación de un sistema portátil que combina sensores impresos y convencionales. Esta tecnología permite a los profesionales de la salud obtener información precisa sobre las lesiones de los pacientes, facilitando un seguimiento más efectivo. La colaboración con Blautic Designs, AIMPLAS (Instituto Tecnológico del Plástico), Creso Printing Group y la Universitat Politècnica de València (UPV) ha sido fundamental para el desarrollo de esta solución innovadora.
La financiación del proyecto proviene del Instituto Valenciano de Competitividad e Innovación (IVACE+i), a través de su programa de proyectos estratégicos en cooperación, así como de fondos FEDER. Esto demuestra el compromiso de las instituciones con la mejora de la salud y la innovación tecnológica en la comunidad.
El sistema Kinessensor se centra en la integración de sensores impresos flexibles en bandas kinestésicas u órtesis. Esto permite la medición inmediata y específica de variables críticas en pacientes que sufren lesiones o dolores musculoesqueléticos. Además, el sistema incluye una comunicación inalámbrica de datos, lo que facilita la monitorización en tiempo real de la evolución del paciente. La incorporación de IA permite identificar patrones que pueden ser cruciales para la corrección inmediata de problemas, mejorando así la calidad de la atención médica.
### Beneficios para Pacientes y Profesionales de la Salud
Uno de los aspectos más destacados del proyecto Kinessensor es su capacidad para empoderar a los pacientes en su proceso de recuperación. Al permitir que los pacientes continúen sus ejercicios de forma autónoma en casa, con la seguridad de estar monitorizados, se mejora la experiencia de rehabilitación. Los impulsores del proyecto han observado que esta metodología no solo mejora los resultados de rehabilitación, sino que también reduce el tiempo de recuperación.
La prueba de concepto del Kinessensor se ha centrado en la inhibición muscular artrogénica (AMI), una condición que puede generar hipertonía en la musculatura isquiotibial y que está frecuentemente asociada a lesiones del ligamento cruzado anterior y a la cirugía protésica de rodilla. La detección temprana de AMI es crucial, ya que esta condición puede conllevar contracturas musculares, aumento del dolor y dificultades en la rehabilitación. Con el uso de Kinessensor, los profesionales de la salud pueden tomar decisiones más informadas y rápidas, previniendo molestias mayores y mejorando la evolución del paciente.
El impacto de este proyecto va más allá de la simple monitorización de lesiones. La combinación de tecnología avanzada con un enfoque centrado en el paciente representa un cambio significativo en la forma en que se aborda la rehabilitación. La integración de la IA en el proceso no solo optimiza el tratamiento, sino que también proporciona a los profesionales de la salud herramientas valiosas para mejorar la calidad de vida de sus pacientes.
En resumen, el proyecto Kinessensor del hospital Ribera IMSKE es un claro ejemplo de cómo la innovación tecnológica puede transformar el sector de la salud. A medida que la inteligencia artificial y la monitorización remota continúan evolucionando, es probable que veamos un aumento en la adopción de soluciones similares en el futuro, lo que beneficiará tanto a pacientes como a profesionales de la salud en su búsqueda de una atención más efectiva y personalizada.