La Selección española femenina de baloncesto sub-18 ha logrado un hito significativo al coronarse campeona del Eurobasket, un torneo que se ha celebrado en La Palma. Este triunfo, que se concretó el pasado domingo, se produjo tras una emocionante final donde España se impuso a Finlandia con un marcador de 81 a 72. Este éxito no solo representa un logro deportivo, sino también un símbolo de la creciente fuerza del baloncesto femenino en el país.
### Un Camino hacia la Victoria
Desde el inicio del torneo, la selección mostró un rendimiento sobresaliente, destacándose en cada partido con un juego cohesionado y estratégico. En la final, el pabellón Roberto Estrello se llenó de aficionados que apoyaron a las jugadoras, creando un ambiente electrizante. El primer cuarto fue crucial, donde España tomó la delantera con una ventaja de 12 puntos, terminando el primer periodo con un marcador de 24-12. Este inicio sólido fue impulsado por la destacada actuación de Sara Okeke, quien anotó 8 puntos en esos primeros diez minutos.
A medida que avanzaba el partido, la selección española continuó mostrando su dominio. En el segundo cuarto, la ventaja se amplió a 43-31, gracias a la contribución de jugadoras como Inés Monje, Gina García y Adriana Díaz. Sin embargo, Finlandia no se dio por vencida y, tras un tercer cuarto más equilibrado, logró reducir la diferencia a solo 4 puntos, dejando el marcador en 56-52 al finalizar el tercer periodo. Este momento fue clave, ya que la presión aumentó y el partido se tornó más competitivo.
### La Resiliencia de la Selección
El último cuarto fue testigo de la resiliencia y la determinación del equipo español. Un triple de Mireya Sanz al inicio del cuarto final no solo aumentó la ventaja, sino que también inyectó confianza en el equipo. Con un juego defensivo sólido y un ataque bien coordinado, las españolas comenzaron a distanciarse nuevamente, alcanzando un marcador de 72-57. A pesar de los esfuerzos de Finlandia por recortar distancias, España mantuvo la calma y la concentración en los momentos críticos.
Finlandia, que había demostrado ser un rival formidable, logró acercarse a seis puntos en los últimos segundos del partido, pero la experiencia y la habilidad de las jugadoras españolas prevalecieron. Con tiros libres acertados por parte de Gina García, España selló su victoria con un marcador final de 81-72. Este triunfo no solo les otorgó el oro, sino que también les permitió celebrar ante su afición, consolidando su lugar en la historia del baloncesto femenino europeo.
La medalla de plata fue para Finlandia, que luchó con valentía a lo largo del torneo, mientras que Francia se llevó el bronce tras vencer a Bélgica en el partido por el tercer puesto con un contundente 72-47. Este podio refleja el alto nivel de competencia en el baloncesto femenino europeo y la creciente popularidad de este deporte entre las jóvenes atletas.
El éxito de la selección sub-18 es un reflejo del trabajo arduo y la dedicación de las jugadoras, así como del apoyo de entrenadores y familias. Este campeonato no solo es un logro individual, sino que también representa un paso adelante para el baloncesto femenino en España, que continúa ganando reconocimiento y admiración a nivel internacional. Con este triunfo, se espera que más jóvenes se sientan inspiradas a seguir sus pasos y a participar en este emocionante deporte, contribuyendo al crecimiento y desarrollo del baloncesto femenino en el país.