La Feria de Málaga, uno de los eventos más esperados del año en la ciudad andaluza, se encuentra en el centro de atención mientras se prevé una ola de calor que podría hacer que las temperaturas alcancen niveles extremos. Este año, la celebración coincide con los últimos días de un periodo de altas temperaturas que ha afectado a gran parte de la península ibérica. A pesar de que Málaga no ha sido la más afectada, el director de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Jesús Riesco, ha advertido que el calor será más intenso de lo que se había anticipado inicialmente.
**Temperaturas en Aumento: Un Verano Sofocante**
A medida que se acerca el inicio de la Feria, las previsiones meteorológicas indican que la capital malagueña podría experimentar temperaturas que superen los 38 grados a partir de la próxima semana. En el interior de la provincia, se espera que los termómetros alcancen los 40 grados durante el fin de semana. Riesco ha señalado que, aunque los primeros días de Feria no presentarán grandes cambios, a partir del domingo se anticipa un aumento significativo en las temperaturas.
La situación climática actual se caracteriza por un periodo estable, marcado por una dorsal anticiclónica que traerá consigo temperaturas muy altas. Para los primeros días de la Feria, se pronostican máximas superiores a los 30 grados y mínimas que no bajarán de los 25. Sin embargo, el verdadero calor se sentirá entre el domingo y el miércoles, cuando se prevé que las temperaturas alcancen entre 36 y 38 grados, dependiendo de la zona de la capital.
Este aumento de temperatura no solo afectará a los eventos al aire libre, sino que también podría influir en la experiencia de los asistentes, quienes deberán tomar precauciones para mantenerse hidratados y protegidos del sol. La Aemet ha activado un aviso amarillo por calor en varias comarcas de la provincia, incluyendo Ronda y Antequera, donde se espera que las temperaturas alcancen hasta 42 grados.
**Impacto en la Ocupación Hotelera y Eventos de la Feria**
A pesar del calor extremo, la Feria de Málaga 2025 sigue siendo un atractivo importante para turistas y locales. La ocupación hotelera durante este evento se prevé que alcance casi el 90%. Aunque se ha reportado una ligera disminución en comparación con el año anterior, los hoteleros son optimistas y creen que la situación puede mejorar a medida que se acerque la fecha de la Feria.
La Feria no solo es conocida por su ambiente festivo, sino también por su rica oferta cultural y gastronómica. Las casetas de las Cofradías de Málaga, que son un punto central de la celebración, han preparado un programa variado que promete atraer a un gran número de visitantes. Además, la feria taurina también genera gran expectación, con la incertidumbre sobre la participación de figuras destacadas del toreo, como Morante, que añade un elemento de intriga al evento.
El clima caluroso puede influir en la programación de actividades, y los organizadores están tomando medidas para garantizar que los asistentes puedan disfrutar de la Feria de manera segura. Se están implementando estrategias para proporcionar sombra y áreas de descanso, así como la disponibilidad de agua y bebidas frías en todo el recinto ferial.
A medida que se acerca la Feria de Málaga, la combinación de calor extremo y celebraciones vibrantes plantea tanto desafíos como oportunidades. Los organizadores y los asistentes deberán adaptarse a las condiciones climáticas para disfrutar de uno de los eventos más emblemáticos de la ciudad. La Feria de Málaga 2025 promete ser un espectáculo inolvidable, a pesar de las altas temperaturas que se anticipan.
