La ciudad de Málaga se encuentra en un momento crucial en cuanto a la planificación de su infraestructura deportiva. El alcalde, Francisco de la Torre, ha comenzado a explorar nuevas opciones para la construcción de un estadio, alejándose de la idea de remodelar el actual Estadio de La Rosaleda. En este contexto, se ha propuesto la ubicación de un nuevo estadio en el Puerto de la Torre, un área que, aunque aún no está completamente desarrollada, ofrece posibilidades interesantes para el futuro del deporte en la ciudad.
### Nuevas Ubicaciones para el Estadio
La propuesta del alcalde de Málaga se centra en unos terrenos situados junto a la Junta de los Caminos, en San Cayetano. Esta área ha cobrado relevancia en el planeamiento urbanístico de la ciudad, especialmente ahora que la presión de los plazos del Mundial 2030 ha disminuido. De la Torre ha afirmado que se realizará un estudio para evaluar las mejores alternativas disponibles en la ciudad, destacando que el Puerto de la Torre tiene un espacio adecuado para un proyecto de gran envergadura.
Sin embargo, el alcalde ha sido claro en señalar que aún existen dudas técnicas que deben resolverse antes de avanzar. La conectividad con la ronda y otros aspectos logísticos son cuestiones que deben discutirse con las autoridades competentes, como Carreteras y el Estado. La parcela en cuestión, aunque es una opción viable, todavía no ha sido promovida urbanísticamente, lo que plantea desafíos adicionales para su desarrollo.
De la Torre ha enfatizado la importancia de resolver la conectividad de la nueva ubicación, ya que el acceso al estadio es fundamental para su éxito. A diferencia de La Rosaleda, que está integrada en el tejido urbano y es accesible a pie o en bicicleta, el nuevo estadio en el Puerto de la Torre dependería más del transporte público y privado. Esto podría cambiar la dinámica de cómo los aficionados acceden al recinto, lo que es un factor a considerar en la planificación.
### Análisis de Estudios Previos
A pesar de la nueva dirección que está tomando la propuesta del estadio, el alcalde ha defendido la validez de los 17 estudios previamente financiados por las tres administraciones (Ayuntamiento, Junta y Diputación). Estos estudios han explorado diversas ubicaciones y han proporcionado información valiosa que puede ser útil, independientemente de la decisión final sobre el nuevo estadio. De la Torre ha afirmado que «no hay dinero tirado» y que los análisis realizados incluyen aspectos como la compatibilidad de ciudades deportivas, el conocimiento del suelo y subsuelo, y el estudio de la zona de la actual Rosaleda.
Además, el alcalde ha confirmado que aún queda parte del presupuesto disponible para realizar nuevos estudios técnicos, lo que sugiere que la planificación del nuevo estadio se llevará a cabo de manera meticulosa y fundamentada. La intención es que cualquier decisión que se tome esté respaldada por datos y análisis sólidos, lo que es esencial para un proyecto de esta magnitud.
La falta de espacios llanos en Málaga también se ha mencionado como un factor limitante en la búsqueda de ubicaciones adecuadas para el nuevo estadio. La geografía de la ciudad, que combina mar y montaña, presenta desafíos únicos para la planificación urbana. Sin embargo, el alcalde ha expresado su confianza en que se pueden encontrar soluciones creativas para superar estos obstáculos y crear un estadio que no solo sirva como un lugar para eventos deportivos, sino que también contribuya al desarrollo urbano de la ciudad.
En resumen, la propuesta de un nuevo estadio en el Puerto de la Torre representa un cambio significativo en la visión del alcalde para el futuro deportivo de Málaga. A medida que se avanza en los estudios y se resuelven las dudas técnicas, la ciudad se prepara para dar un paso importante hacia la modernización de su infraestructura deportiva, lo que podría tener un impacto positivo en la comunidad y en la imagen de Málaga como un destino atractivo para eventos deportivos de gran escala.